La economía mexicana tuvo un sorprendente crecimiento del 2.9% en los primeros nueve meses de 2022, lo que se espera que se mantenga similar durante todo el año. A pesar del entorno económico difícil a nivel mundial, que llevó a algunos países a una «recesión técnica», México logró mantener un crecimiento sólido.
Sin embargo, se espera que en 2023 la economía mexicana disminuya su tasa de crecimiento a alrededor del 1%, debido a la restricción monetaria que tendrá lugar en varios bancos centrales, incluyendo el Banco de México.
Además, es posible que se produzca una pequeña y corta recesión en la segunda mitad de 2023, dependiendo de la evolución de la economía estadounidense. Aunque se espera que la inflación general disminuya, la inflación subyacente se mantendrá elevada, cerrando 2022 en un nivel superior al 8%.
Esto es preocupante ya que el componente subyacente es responsable de casi el 75% del Índice Nacional de Precios al Consumidor, por lo que es difícil que se alcance la meta oficial de inflación del 3%. A pesar de esto, es importante tener en cuenta que, aunque la economía mexicana experimente una desaceleración en 2023, esto es parte del proceso de control de la inflación y es necesario para estabilizar la economía a largo plazo.